¿Qué es la inflación?
¿Quién no se ha preguntado alguna vez qué es la inflación? ¿Por qué nuestros ahorros pierden valor con el paso del tiempo? Hoy os vamos a explicar qué es la inflación, cómo nos afecta y a que se debe este proceso económico.
Siempre se ha entendido el ahorro como una virtud, pero el ahorro acompañado de la inflación provoca que nuestro dinero pierda valor con el paso del tiempo. El mercado está sujeto a cambios generados por muy diversos motivos. Para entender a qué se debe la inflación y cómo podemos vernos menos afectados por ella, sigue leyendo.
Entendamos qué es la inflación
La inflación es el aumento de precio de bienes y servicios durante un periodo de tiempo. Este proceso económico se debe al desequilibrio que se genera entre la producción y la demanda dando lugar a una subida continuada de los precios de distintos productos y servicios.
Cuando los precios suben, con el mismo dinero podemos adquirir menos productos o servicios que tiempo atrás, lo cual provoca que nuestros ahorros pierdan valor. Si comparamos el precio de la cesta de la compra de una familia de cuatro miembros a día de hoy, con el precio de esa misma cesta hace dos años podemos ver como la inflación actúa directamente en nuestra vida cotidiana.
¿Qué causa la inflación?
La inflación tiene diferentes causas. Es la conjunción de diferentes factores la que la provoca, pero vamos a hablar de los tres más relevantes:
- Que la demanda de bienes sea superior a la capacidad de producción y suministros de los mismos.
- Que el precio de las materias primas aumente, bien por escasez de los mismos o por la decisión de los propios productores. En muchos casos este fenómeno se debe a escasez de las materias primas, a problemas de producción o de suministro de los mismos.
- Que se prevea un incremento de los precios a largo plazo y se vaya realizando un incremento gradual para que el impacto no sea tan brusco.
La inflación se genera por la conjunción de diferentes causas y como estas pueden llegar a afectar dando lugar a cambios en los precios de los bienes de consumo. La inflación es sin duda un proceso muy complejo debido a que fluctúan diferentes elementos para dar lugar a los cambios que la generan. No podemos entender la inflación como algo meramente negativamente. Los países en ocasiones utilizan la inflación como un elemento para equilibrar la economía, estimulando el consumo y la actividad.
Factores para calcular la inflación
Para calcular la inflación se tienen en cuenta la media de productos que puede consumir una familia. Los hábitos de consumo varían de unas familias a otras, por ello para el cálculo se tienen en cuenta todos los bienes, servicios o productos que consumen las familias. Hablamos de:
- Artículos de consumo diarios, como alimentos o la gasolina,
- Bienes de consumo duraderos como ropa, electrodomésticos o aparatos electrónicos
- Servicios como dentista, peluquería, seguros, alquiler de propiedades o actividades de ocio.
La inflación puede generarse en distintos grados, principalmente en tres de los cuales seguro que ya habéis oído hablar en medios de comunicación en las noticias.
- Inflación moderada: ligero incremento de los precios, no supera el 10% anualizado. Es lo que puede conocerse comúnmente como la inflación común o habitual.
- Inflación galopante: la inflación aumenta ya en dos o tres dígitos de forma interanual, lo cual supone incluso un cambio en los hábitos de consumo debido al fuerte incremento de los precios.
- Hiperinflación: este tipo de inflación se da cuando un país está inmerso en una crisis económica por diferentes causas, una guerra, una pandemia o una crisis social. Se puede llegar a hablar de una inflación de más del 50% mensual generando que el valor de la moneda se desplome.
¿Cómo se mide la inflación?
Para medir la inflación en la zona euro se utiliza un índice llamado IAPC, Índice Armonizado de Precios de Consumo. Este índice sirve para que en todos los países de la zona euro se aplique la misma metodología, de forma que se asegure la unificación de precios entre países. El IAPC se calcula teniendo en cuenta la compilación de precios, la ponderación de los grupos de productos y la ponderación de países.
Y bien, ¿Cómo se mide la inflación? ¿Cómo se calcula la inflación que provocará cambios de precios en distintos bienes o productos?
Para saber cuánto han variado los precios, se utiliza el IPC: Índice de Precios al Consumidor. EL IPC mide el precio de una ‘cesta’ de productos y servicios en un lugar y periodo de tiempo. Se seleccionan productos concretos que se asemejan al consumo habitual de una familia. Una vez recopilada esta información, se hace un seguimiento de los precios durante un periodo determinado de tiempo. Este tipo de productos deben ser productos de consumo habitual que inevitablemente consumimos y generan un impacto en la economía familiar.
Este indicador nos permite saber cuánto han variado los precios, lo cual nos da un análisis sobre el coste de vida de una familia o individuo en un momento determinado de tiempo. En INE hace uso del IPC por medio de una herramienta para actualizar la variabilidad de los precios de distintos bienes y servicios.
¿Cómo superar la inflación?
Si tenemos unos ahorros de 10.000 euros y la inflación media anual es de 5%, tras 5 años de ahorro estático, nuestro dinero valdrá un 5% menos anualizado. Lo cual supondría que cada año nuestro ahorro habría perdido un valor de 500€. En cinco años la pérdida de la capacidad de ahorro sería del 25%, suponiendo una pérdida de su valor de 2500€.
Si invertimos en distintos productos como pueden ser un fondo de inversión, podemos rentabilizar nuestros ahorros minimizando el impacto que pueda tener la inflación. Además de minimizar el impacto de la inflación, podemos generar beneficios de nuestros ahorros y por tanto, mejorar nuestra calidad de vida.