¿Eres presa del pánico comprador?
En estas fechas, muchos son los que compran los regalos navideños sabiendo que les ha pillado el toro. Cuando no hay tiempo para pensar y comparar, se acaba comprando peor y gastando más dinero.
En el mundo de las inversiones, también se pueden producir este tipo de situaciones. A menudo, por querer invertir rápido se acaba invirtiendo mal. Un ejemplo es el mercado inmobiliario en momentos de subidas continuadas de los precios de las casas. Cuando los precios subían todos los meses de manera sostenida, era muy habitual ver compradores que se lanzaban casi a por la primera opción razonable que veían.
Puedes leer el artículo completo en la Web de El Confidencial – Cotizalia en el Blog de Juan Gomez Bada Rumbo Inversor