Hace dos años, a raíz de la pandemia, Netflix se convirtió en una de las empresas de moda. La N de las FAANG consiguió en unos meses convertirse en líder de las plataformas de streaming a nivel internacional. Dos años después, está perdiendo cuota de mercado y su cotización ha caído un 70%, por debajo de los niveles prepandemia.
Si analizamos la compañía con mentalidad de empresario, ¿las decisiones que está tomando en los últimos tiempos son buenas para el negocio a largo plazo?
Puedes leer el artículo completo en el blog Rumbo Inversor de El Confidencial.